La mejor manera de aprender fotografía de bodas

El año pasado pasé un buen tiempo tratando de aprender a fotografiar bodas. Si bien aún tengo mucho por aprender, espero poder hablar en base a mi experiencia (tanto positiva como negativa) sobre cómo dar los pasos correctos para ser un fotógrafo de bodas.

1) Desarrolla tu interés

Si estás leyendo este artículo, es muy probable que ya hayas dado este paso. Tal vez estás interesado en la fotografía de bodas por los potenciales ingresos, o quizá simplemente te gustan las bodas y quieres documentarlas.

En cualquier caso, la fotografía de bodas es especial y realmente requiere un tratamiento diferente. Un fotógrafo con el que trabajé me contó que lo que más le gustaba de la fotografía de bodas era que combinaba muchos tipos de fotografía diferentes: macro (para los anillos), arquitectura (para las hermosas iglesias) e incluso algo de deportes (imagina cómo es capturar a una pareja que se mueve rápidamente).

Encuentra fotógrafos de boda cuyo trabajo te inspire. Hay cientos de fotógrafos de bodas talentosos y la inspiración nunca está lejos. Destinar un tiempo a aprender qué te gusta y cómo presentar la escena es crucial para desarrollar un estilo. La fotografía de bodas es un ámbito único que te cautivará fácilmente.

2) Comienza como asistente

¿Hay alguien que haya tomado las fotos de una boda sin haber sido asistente de un profesional? Seguro. ¿Lo recomiendo? Para nada. Si puedes lanzarte a fotografiar bodas por tu cuenta, eres mucho más hábil que yo. Yo ni siquiera me sentía cómodo al intentarlo.

Lo primero que hice fue empezar a hacer contactos y a encontrar fotógrafos en mi área. Mi primera idea fue enviar correos electrónicos a los fotógrafos de bodas locales pidiéndoles que me incluyan como asistente o segundo fotógrafo. La mayoría de ellos no respondió.

Ser el segundo fotógrafo te permite aprender los pormenores de las bodas sin toda la presión.

Sin embargo, tras suficiente persistencia, comencé a recibir trabajo de los profesionales locales. Comenzar como segundo fotógrafo fue una de mis experiencias favoritas. Pude ir con varios fotógrafos diferentes a tomar fotos de bodas increíbles. Los fotógrafos con los que trabajé tenían décadas de experiencia y de verdad sabían lo que hacían. Estudiar su trabajo y sus métodos fue lo mejor que hice a fin de aprender lo que se necesita para fotografiar bodas.

Si eres un buen asistente o segundo fotógrafo, seguirás recibiendo trabajo. Recuerda que cuando estás trabajando como segundo fotógrafo, tu trabajo es complementar el trabajo del fotógrafo principal. No te metas en sus fotos y toma las tuyas desde ángulos complementarios (no idénticos). Un buen método es usar lentes con una distancia focal distinta. Si el fotógrafo principal está usando un teleobjetivo, tú aborda la situación con una perspectiva gran angular. Obtener dos tomas de una situación es genial para el fotógrafo principal, porque le permite entregarle más imágenes al cliente.

Lo más importante es que hagas lo que te pide sin hacer muchas preguntas. Trata de anticiparte y considera sus necesidades. He trabajado tanto de ayudante como de fotógrafo principal en bodas, y cuando soy el principal, tengo tanto por hacer que tener a un asistente que se encargue de las tareas pequeñas es una bendición.

Cuando estás empezando no hay garantía de que te paguen o que recibas una compensación. Quizá ni siquiera puedas usar las imágenes para tu portafolio; depende de las circunstancias del contrato bajo el que estés trabajando. Asegúrate de que estas cosas estén por escrito y de entender cuáles son las expectativas del fotógrafo principal respecto a ti. Sin embargo, a pesar de que durante los primeros meses no te ganarás la vida trabajando como segundo fotógrafo, el conocimiento que obtienes es una inversión enorme en tu talento.

3) Desarrolla un negocio

Quizá más que en cualquier otro tipo de fotografía, aprender cómo funciona el negocio de las bodas es esencial para tu éxito. La industria tiene un índice de rotación altísimo que en gran parte se debe al desconocimiento de lo que se necesita para manejar un negocio.

Si no te gustan los contratos, este no es el negocio correcto para ti. Los contratos delimitan las expectativas del trabajo y protegen a ambas partes. Investiga los contratos que usan los fotógrafos. Si buscas un poco, encontrarás ejemplos fácilmente disponibles. Considera contratar a un abogado para asegurar que tu contrato no tiene brechas. Muchos fotógrafos también disponen de seguros de responsabilidad civil, así como de un seguro que protege su equipo en caso lo roben o se dañe durante el trabajo.

Determina el modelo de negocios correcto para ti. ¿Vas a vender impresiones? ¿Discos con archivos digitales? ¿Álbums? Todos ellos requieren una investigación y reflexión que va más allá del alcance de este artículo.

Por último, posiblemente el mayor reto que tengas que enfrentar sea determinar cómo promocionar tu negocio. No hay secretos, solo mucho trabajo que debes orientar a construir una marca que la gente identifique y reconozca. Encuentra formas efectivas de hacer publicidad. Considera el hecho de que hay opciones de publicidad gratuitas (boca en boca) y pagadas. Yo creo firmemente que la mejor publicidad son los clientes satisfechos.

4) Investiga y elige el equipo correcto

Muchos fotógrafos cometen el error de reducir la calidad de su trabajo a cuerpos de cámara de alto costo y lentes caros. Probablemente a estas alturas has escuchado que el equipo no lo es todo cuando se trata de ser un buen fotógrafo.

Sin embargo, la otra cara de la moneda es que un mejor equipo es una enorme ventaja en cualquier tipo de fotografía. La fotografía de bodas no es la excepción. Algunas situaciones te pondrán bajo mucha presión si solo dispones de un equipo para principiantes. Las iglesias varían desde las que están bien iluminadas hasta cuevas artificiales. Para momentos como esos es que necesitarás el equipo correcto a fin de capturar debidamente la boda.

Para mí, el kit para bodas tiene dos componentes esenciales: un cuerpo de cámara con alto rendimiento de sensibilidad ISO y objetivos rápidos de distancia focal fija. Mi opción preferida en cuestión de lentes son los objetivos de distancia focal fija de f/1.4 y f/2, pues me permiten fotografiar las bodas a mi estilo y garantizan que pueda capturar suficiente luz.

Un cuerpo con alto rendimiento de sensibilidad ISO puede salvarte cuando estás en los lugares más oscuros. Un flash también es importante, aunque muchas iglesias no permiten usar el flash durante la ceremonia; e incluso si está permitido, notarás que tus clientes y sus invitados prefieren no ver un flash brillando cada pocos segundos.

Una cámara con un buen rendimiento de sensibilidad ISO y los objetivos rápidos de distancia focal fija permiten tomar fotos con poca luz.

No pases por alto la importancia de llevar algunos lentes rápidos más largos. Puede ser que durante la ceremonia te des cuenta que estás más lejos de lo que habías anticipado. Dependiendo de lo que pida el cliente y las normas de la iglesia, puedes estar situado en el balcón o en una esquina de la iglesia. Recientemente adquirí una Canon 135L, que tiene un lente de 135mm f/2 fantástico para esas ocasiones. Personalmente, creo que los fotógrafos no deben constituir una distracción durante la cermonia, así que usualmente actúo de modo discreto durante la misma.

Asegúrate de llevar suficientes tarjetas de memoria para cubrir todo el día. Las necesidades de cada uno pueden variar, pero con mi cámara de 21 megapíxels, yo llevo memoria como para almacenar varias docenas de gigabytes. Lo último que quieres es llenar tus tarjetas durante la ceremonia y que no te quede espacio de almacenamiento para la recepción.

Tampoco te atrevas a fotografiar una boda sin equipo de respaldo. Esto quiere decir más tarjetas de memoria, baterías y, sobre todo, un cuerpo de cámara adicional. Esto puede ser costoso, pero recuerda la ley de Murphy: lo que puede salir mal, saldrá mal. ¿Qué les vas a decir a tus clientes si tu cámara deja de funcionar? Elige una cámara adicional a la que puedas cambiar con facilidad de ser necesario. Lo mejor es usar dos cámaras iguales, pero esto no es económicamente factible para mucha gente.

5) Haz una lista de control: la preparación lo es todo

Pienso que la gente tiende a pensar en las bodas como un tipo de evento uniforme, pero la verdad es que a través de los variados márgenes religiosos y culturales, las bodas son experiencias radicalmente diferentes. Además, la pareja tiene tantas opciones que jamás habrá dos bodas iguales. Por lo tanto, tus experiencias variarán tremendament de fin de semana a fin de semana.

Creo que la habilidad más subestimada es saber cómo interactuar con tus clientes y hacer que se sientan cómodos. Habilidades como esta se aprenden solo con la práctica y el tiempo.

Si hay algo que me ayudó a mejorar mis resultados radicalmente durante el primer año, ese algo fue sentarme con las parejas para tener una idea de su boda. De esta manera se puede saber cuáles son las expectativas para el día, planear la secuencia de los eventos y asegurarte de que se cubren sus necesidades. Recuerda que tu negocio es proveer servicio al cliente, y si tus clientes están felices, tendrás más trabajo.

6) Mejora tus habilidades de edición

Hoy en día, el flujo de trabajo digital es una parte importante de casi todo negocio fotográfico. La fotografía de bodas tiene algunas demandas específicas.

Creo que el mayor reto que enfrentan los fotógrafos de bodas durante el proceso de edición es el gran volumen de imágenes que deben procesar. En el transcurso de una boda, no es inusual tomar un par de miles de fotos. Dependiendo de la escala y duración del evento, pueden ser incluso más. Por ello, es importante manejar un flujo de trabajo que sea eficiente, ya que es la clave para no quedarse enterrado en trabajo y atrasarse en atender a los clientes. Durante la temporada de verano, cuando es probable que trabajes cada fin de semana, necesitarás destinar un tiempo a manejar toda la edición a fin de mantenerel ritmo de trabajo.

Usar Adobe Lightroom para administrar catálogos grandes facilita el proceso de edición.

Photoshop es una herramienta extraordinaria para procesar y editar imágenes. Sin embargo, tal vez no está construida para procesar las miles de imágenes que se producen en una boda. Para mí, la herramienta más adecuada es Adobe Lightroom, una rama de Photoshop que está orientada a procesar una gran cantidad de imágenes.

Usar Lightroom no requiere que abandones Photoshop por completo. Los dos programas pueden trabajar en tándem. Para mis propósitos, Lightroom es esencial para manejar la cantidad de imágenes que tengo, así como para catalogarlas. Lightroom tiene un montón de funciones muy poderosas para etiquetar, organizar y archivar imágenes.

Lo primero que hago es trasladar todas las imágenes a mi computadora y luego hago una copia de seguridad de toda la boda en por lo menos dos (y mejor si son tres) lugares de almacenamiento diferentes. A continuación realizo una eliminación selectiva. Eliminar selectivamente un grupo de imágenes quiere decir descartar lo innecesario y reducir la colección justo a lo que se le va a entregar al cliente. Primero hago una eliminación selectiva «superficial» y descarto todas las imágenes que estoy seguro que no entregaré y, por lo general, voy reduciendo el número de imágenes gradualmente.

El propósito de este artículo no es profundizar en la edición de las fotos por el simple hecho de que cada fotógrafo parece tener un método que le funciona mejor y no hay dos métodos iguales. Solo debes recordar lo que requiere la edición de eventos grandes como las bodas.

Hablé con un amigo que solamente edita fotos de bodas para otros fotógrafos y me dijo cuáles son los principales trucos que usa. Primero, dominar Aperture o Lightroom para una edición masiva. Lo segundo es aprender a dominar las acciones de Photoshop que te permitan realizar una edición más a fondo en bloque y rápidamente. Finalmente, dijo que lo más importante era aprender a usar el tampón de clonar con una opacidad del 70%. Tendrás que clonar un montón para corregir las áreas oscuras y especialmente las ojeras. Usar una opacidad del 70% en tu tampón de clonar es probablemente el secreto más importante y mejor guardado de la industria de la fotografía de bodas.

Ten en mente que vas a pasar la mayor parte del tiempo editando una boda, no fotografiándola. Si la boda dura seis horas, pasarás al menos otras seis editando. Pero hay gente que hará la edición por ti si le pagas. Algunos fotógrafos que conozco le pagan directamente al editor un tercio de lo que reciben en total por fotografiar la boda.

7) ¡Sigue trabajando!

Cuando pienso en mi propio progreso, reconozco que he aprendido un montón fotografiando bodas el año pasado. Sin embargo, también me abruma la cantidad de progreso que aún me falta por hacer. Esto incluye tanto el aspecto fotográfico como el aspecto empresarial. Encontrar buenos amigos fotógrafos que me apoyen ha sido un tesoro para mí y me ha ayudado a mejorar más que cualquier otra cosa.

La industria de la fotografía de bodas es dura y mucha gente que conozco no puede mantenerse en ella. Muchos fotógrafos lo intentan, pero no les gusta o no pueden manejarlo. No es un estilo de vida glamoroso tipo «haz acto de presencia y gana millones». Los fotógrafos de bodas enfrentan muchos retos, pero el compromiso de mejorar y trabajar constantemente puede llevarte al éxito.