() translation by (you can also view the original English article)
Has dedicado un tiempo a desarrollar las técnicas y habilidades para usar tu cámara, has tratado de entender la configuración de la exposición y te has esforzado en obtener la foto perfecta cada vez. Pero a veces, simplemente no estás satisfecho con los resultados y no sientes que tu trabajo expresa lo que quieres. ¿Cómo refinar tu arte de manera que puedas expresarte como fotógrafo y hacer que tus fotos sean reconocidas como de tu autoría? He aquí unos cuantos consejos para ayudarte a lograrlo.
Razones para tomar fotos
Para empezar, necesitas establecer por qué estás tomando fotos. Muchas personas empiezan con intenciones de libertad artística, pero terminan cayendo en los tipos de trabajo que tienen demanda o que pagan bien. No estoy diciendo que haya algo malo con eso, todos tenemos que ganarnos la vida, pero si quieres expresarte como fotógrafo, entonces en lugar de encajar en el molde de un determinado tipo de trabajo, necesitas descubrir qué te apasiona fotografiar.
No puedes forzarte a ser diferente, sino que se trata de entender que cada uno de nosotros es un ser humano único. Todos tenemos diferentes maneras de pensar, reaccionar y apreciar el mundo a nuestro alrededor. Es esta expresión natural la que definirá tu estilo fotográfico y hará la diferencia respecto a los otros fotógrafos.
No hay un forma correcta o incorrecta de abordar esto y tampoco se trata de tratar de complacer a otro con tu trabajo. Se trata simplemente de determinar qué te satisface a ti como artista; se trata de tu libertad de expresión, no de encajar en un molde.
¿Ignorar las reglas?
Así que con esto en mente, es hora de plantear cómo establecer tu estilo en la práctica. A menudo en fotografía estamos encaminados a seguir ciertas normas para determinados tipos de trabajo a fin de tomar la foto perfecta, cosas simples como enfocarse en los ojos del sujeto de un retrato o asegurarte de tener algún punto de interés en el primer plano de tu foto de un paisaje.
Ahora bien, no voy a decirte que ignores todas las pautas (prefiero no llamarlas reglas, ya que ello implicaría que hay una manera correcta y otra incorrecta de tomar fotos), pero yo te animaría a que evites aspirar a la perfección en una foto. Tu trabajo debe ser realizado desde tu punto de vista; cómo tú abordas y «ves» el sujeto definirá cómo lo expresas.
Eso es lo que necesitas cultivar para desarrollar un estilo personal, en lugar de concentrarte en cumplir con todas las reglas del libro mientras tomas una foto, pues esto bien puede limitar tu creatividad y visión para la toma. Es importante que disfrutes de la toma y de lo que estás produciendo. Si pasas todo tu tiempo simplemente cumpliendo todas las reglas, ¡tu trabajo se verá justo como el de todos los demás! Una foto puede ser técnicamente perfecta, pero estéticamete aburrida.
Desarrollando tu estilo
Ahora depende de ti pensar en qué quieres expresar y cómo quieres hacerlo, y nadie puede realmente enseñarte cómo hacer esto. Tener un estilo personal no quiere decir que tienes que ser considerado como pionero, vanguardista o un artista revolucionario. Se trata de que te encuentres a ti mismo en un formato que elijas y que te expreses a través de ese medio.
Recuerda que tu estilo es el resultado de una serie de elecciones sobre el equipo, tu formación, cómo abordas tu trabajo, el sujeto y el entorno en el que tomas tus fotos. Evalúa con qué cámara te sientes mejor trabajando, qué te entusiasma, si quieres capturar imágenes, por ejemplo, en estilo documental o artístico libre, y cuál quieres que sea tu sujeto.
Depende de ti considerar esta combinación de decisiones para darte la mejor oportunidad de desarrollar un estilo que te represente a ti como fotógrafo.
¿Qué fotografiar?
Puede que ya tengas definido un sujeto fotográfico con el que siempre trabajas. Eso está muy bien, pero quiero que evalúes si estás tomando fotos que te interesan.
Es muy difícil poner pasión en capturar algo en lo que tienes poco interés. ¿Qué te gusta? ¿En qué lugar te gusta estar? Una vez que sabes las respuestas a esas preguntas, ve e intenta capturar eso, captura cómo te sientes al respecto, captura la experiencia. Usa tus ojos. Mantenlos abiertos y explorando. No pienses solo en lo que te gustaría fotografiar, responde a lo que ves.
¡Ve a explorar!
Mi otro medio favorito de tomar fotos es ir a explorar. Conduzco a un lugar nuevo, estaciono el auto, tomo mi cámara y simplemente camino hasta descubrir algo nuevo. Si algo me llama la atención, paso tiempo con ello y lo capturo tal como lo veo.
Con frecuencia noto que expreso cosas de una manera que otra persona no lo habría hecho; a veces al punto de que me preguntan qué es. De hecho, ¡de vez en cuando es divertido desafiar a la gente y preguntarle qué piensan que es! Pero para mí es un aspecto importante de mi trabajo, que me confirma que estoy expresando lo que me rodea a través de mis ojos y de mi propio estilo individual.
Intenta cosas nuevas
Siempre me ha parecido que hay mucho por aprender cuando intento algo nuevo, cuando me pongo en nuevas situaciones con temas o sujetos diferentes. Es una manera fantástica de descubrir cómo te gusta trabajar y qué te gusta fotografiar
Intentar algo nuevo y disfrutarlo o tener éxito en ello aumentará enormemente tu confianza. Si pruebo un escenario fotográfico nuevo, siempre me agrada cuando se siente bien. Si me siento inspirado por él, mayormente las fotos resultantes les parecen inspiradoras a los demás también. Sigue a tu corazón, no a tu cabeza, y si se siente bien, sigue adelante.
Inspiración
Es importante que encuentres inspiración para mejorar tu alcance como fotógrafo y artista. Hay varias maneras de hacer esto, incluyendo estudiar el trabajo de otros fotógrafos y revisando blogs, revistas y libros de fotografía, todos los cuales están fácilmente disponibles. También puede ser beneficioso encontrar inspiración en cosas diferentes a la fotografía. Sea arte, literatura, música o naturaleza. Depende completamente de ti según lo que te emocione.
También hay opciones que toman mucho más tiempo para ganar experiencia y aprender más sobre tu oficio asistiendo a talleres y seminarios. Por lo general son muy caros, pero invaluables para encontrar a un fotógrafo profesional que actúe como tu mentor o que simplemente te deje trabajar como su asistente. No hay nada que puedas leer o estudiar que remplace la experiencia que podrás ganar trabajando al lado de un profesional. Si se te presenta la oportunidad, ¡aprovéchala!
También es importante entener cómo aprendes. Algunas personas prefieren leer un libro y entender todos los tecnicismos antes de tomar una foto. Mientras que otras, como yo, se inclinan más por simplemente tomar la cámara, salir y comenzar a tomar fotos usando el método de ensayo y error para mejorar. Intenta descubrir cómo aprendes mejor y úsalo a tu favor. ¡No te fuerces a sentarte a leer por horas si prefieres estar afuera tomando fotos!
Sé tu propio crítico
Una vez que has estado afuera en una sesión y ya tienes tus fotos, es hora de observar tu trabajo y ser tu propio crítico. Selecciona tus fotos, obsérvalas y piensa qué podría ser mejor. ¿Qué aspectos del trabajo te gustaría mejorar? ¿Te has concentrado en un sujeto que usualmente notarías o te has expresado de una manera diferente a la usual? ¿Estás emocionado por el trabajo que has producido?
Una vez que has tenido la oportunidad de mirar todo tu trabajo, tienes la opción de compartir con los demás. Yo siempre prefiero compartir mi trabajo personal con familiares y amigos. Ellos serán honestos conmigo y a menudo verán algo diferente en el trabajo que yo no he notado. También es bueno porque mostrar mi trabajo a otros confirmará cómo me siento respecto al mismo. Al margen de lo que digan, solamente el arriesgarme a hacerlo me demostrará si estoy feliz con el trabajo o no.
Si recibes comentarios negativos, aprende de ellos, pero no dejes que definan tu trabajo en el futuro. Por alguna razón inherente a la naturaleza humana, estamos más inclinados a recordar los comentarios negativos que los positivos. Recuerda que el arte es subjetivo, no definitivo.
Aprende de la experiencia
No te desanimes si después de algunos viajes sientes que no puedes ver ningún progreso en el estilo de tu trabajo. Puede tomar un largo tiempo descubrir adónde te llevará tu corazón y es importante continuar tomando fotos, encontrar inspiración y refinar tu perspectiva fotográfica.
Recuerda que siempre tomarás más fotos malas que buenas; los buenos fotógrafos toman malas fotos, ¡pero solo vemos las buenas porque las malas no se publican! No te lamentes de las oportunidades perdidas. Demasiadas veces en el pasado deseé haber presionado el obturador, pero perdí lo que podría haber sido una foto perfecta. Es una gran distracción para el resto de la sesión. Recuerda que siempre habrá más oportunidades. No tengas miedo de fallar o cometer errores, todos los cometemos y te aseguro que aprenderás de ellos.
He aprendido muchísimo de ponerme a mí mismo en diferentes situaciones, así como con el método de ensayo y error. Ahora aprecio que veo el mundo que me rodea de una manera diferente gracias a mi fotografía. Mediante la atención al detalle y desarrollando mi ojo para encontrar puntos de interés, incluso la iluminación en una calle vacía o la sombra proyectada por una línea de árboles llama mi atención.
Encuéntrate a ti mismo
Hay una cita de Ansel Adams que me parece especialmente pertinente: «El trabajo de cada hombre siempre es un retrato de sí mismo». Para mí, esas palabras resumen lo que estoy tratando de decir en este artículo.
Debes dejar que tu trabajo sea una expresión de ti mismo, tus pasiones, tu emoción y lo que sea que en este mundo te apasione. Adams también señala que inevitablemente, cualquier trabajo que se haga, siempre estará influenciado por las experiencias y el mundo que rodea al individuo.
En las situaciones profesionales es posible que sientas que tu trabajo solamente satisfacerá los requerimientos del cliente, pero en realidad, tu estilo y personalidad siempre influenciarán el trabajo que hagas; y cuanto más lo aceptes, tanto más probable es que encuentres tu propia voz como fotógrafo.